40 Tips para que los Padres tengan un Matrimonio Saludable
“Si necesitas una dosis de esperanza o nueva perspectiva, te trataremos de ayudar.”
Tanto el matrimonio como la crianza de los hijos son llamados a largo plazo, y puede ser muy complicado ver el cuadro completo cuando se está metido hasta las rodillas en el sistema del mundo. Si necesitas una dosis de esperanza o nueva perspectiva, te trataremos de ayudar. Te voy a compartir 40 consejos o tips para que tu matrimonio progrese en los ajetreados años de la crianza.
Cuando los días se hagan largos y los años cortos, recuerda que Dios te ha escogido a tí y a tu cónyuge para apoyarse; y a ambos como padres para sus hijos. Van a haber áreas dentro de ti que Dios hará crecer y moldear mientras crías; y áreas en tus niños que verás tomar vida mientras crecen. Si mantienes tu perspectiva abierta al panorama general, puedes hacer que tu matrimonio siga creciendo a lo largo de los años con los niños en casa, y también estar preparado para disfrutar la siguiente etapa juntos una vez que los niños hayan crecido y dejado el nido.
Ya sea que estés agotado/a, harto/a, o simplemente disfrutando de cada momento, oro para que estos 40 consejos te animen y bendigan a ti y a tu matrimonio, y te impulsen hacia un matrimonio y una familia más saludable.
Si te gustan estos tips y quieres letrar tu hogar obtén aquí gratis 40 tips en PDF.
40 Tips para que los Padres tengan un Matrimonio Saludable
Nunca olvides que un matrimonio saludable es un REGALO para tus niños.
¡No te pierdas la alegría! Encuentra tiempo para jugar y disfrutar de tus hijos.
Deja fuera cualquier tipo de comparación o competitividad. No compitas con tu esposo/a ni lo/la compares con tus padres o cónyuges de tus amigos.
Respeta las diferencias del otro.
En vez de comparar el estilo de crianza de tu cónyuge, mejor trabajen juntos para equilibrarse. Madres y padres somos distintos, ¡y eso es bueno!
Recuerda que ponerse de acuerdo en la crianza no significa que harás las cosas exactamente iguales.
En días difíciles, ten más gracia que lo habitual. No tomes sus frustraciones como algo en contra tuyo.
Cuando no estés seguro/a de lo que tu cónyuge quiso decir asume lo mejor (se benigno).
Cuando pienses en algo bueno sobre la manera que tu cónyuge educa a los niños, verbalízalo: llámale, envíale un mensaje de texto, déjale una nota o díselo.
El estímulo o el aprecio pueden ayudar a animarnos en un día difícil. ¿Cómo puedes animar y apreciar a tu cónyuge hoy?
No esperes que tu cónyuge maneje situaciones de los niños de la misma manera que tú lo harías.
No corrijas a tu cónyuge en frente de los niños.
El amor cubre multitud de pecados- recuerda el amor que le tienes a tu cónyuge.
Visualiza el tipo de esposo/a que quieres ser. ¿Qué características te gustaría que tu cónyuge viera en tí? Haz lo necesario para cultivar esas características.
Recuerden que los niños no son el todo. No están en control de ellos y no los pueden criar de manera perfecta. Cuando ponemos a nuestros hijos en un lugar de mayor importancia en nuestras vidas, nuestro matrimonio sufre.
No compares tu carga de trabajo o estrés con la de tu cónyuge. Ambos están ejerciendo llamados diferentes. La comparación y competitividad traerán quiebres a la relación.
Entiendan que cada uno de ustedes están “corriendo su propia carrera” y busquen ser fieles a lo que Dios los ha llamado.
Está bien ser directos con tu cónyuge e hijos. Puedes ser educado, amable y directo al mismo tiempo.
No albergues ninguna amargura ni dejes que las viejas heridas se agraven. Ten las cuentas cortas: Pide perdón y perdona con libertad.
Elogia y celebra a tu cónyuge frente a los niños.
Pónganse de acuerdo en cuanto a la crianza y trabajen juntos. Verlos a los dos como una pareja unida en la que pueden confiar ayudará a dar seguridad a sus hijos.
No exageren. En cualquier situación, nuestra respuesta calmada como padres puede otorgarle a los niños mucha seguridad.
Tengan como prioridad las citas. ¡También cuentas las citas en casa! (Revisa en recursos matrimoniales esta cita entretenida en casa Bienvenidos Al Paraíso y juegos o súbele la temperatura)
Establezcan tiempo para estar solos. Marquen límites (necesarios) con los niños para asegurarse de tener ese tiempo.
Sean equipo en situaciones frustrantes como las rabietas de los niños o las largas horas de sueño.
Dejen tiempo para la intimidad (Marquen en calendario si es necesario)
Planifiquen tiempos para tener contacto físico (acurrucarse, hacerse masajes en la espalda, etc.)
Fomenten una atmósfera de ánimo en el hogar. Motiven a su cónyuge e hijos regularmente.
Acostúmbrate a preguntar a tu cónyuge cómo se encuentra. Mantén un punto de referencia para saber cómo le va en su día y reacciona de forma adecuada. (Revisa esta guía para ayudarte en esta área Guía de Revisión Semanal del Matrimonio)
Ofrezcanse tiempo “libre” el uno del otro sin expectativas ni condiciones. Comunica con antelación las expectativas en cuanto al tiempo o dinero que tomarán cuando estén fuera de casa. Querer tiempo para estar solo no significa que seas ¡un “mal padre” o “mala madre”!
Padres: Incentiven a sus hijas a ser como sus madres; señalen las similitudes.
Madres: Señales y aprecien las similitudes entre el padre y el o los hijos.
Oren el uno por el otro.
Oren juntos por los niños.
Busquen maneras de demostrar afecto.
Pregunten a su cónyuge lo que les hace sentirse más amados y busquen maneras para hacer esas cosas.
Cuando encuentres a tus niños haciendo algo bueno elógialos.
Cúbranse las espaldas. Demuestren su unidad a los niños preguntándoles, ¿Qué dijo el papá / la mamá? Antes de dar una respuesta es mucho más fácil preguntar.
Aprecia y diles que aprecias las cosas que ellos hacen.
Busca instancias para motivar, elogiar y apreciar a tu cónyuge y a los niños.
Si quieres más ayuda en relación a la crianza, echa un vistazo a nuestro recurso 100 Preguntas para Ponerse en la misma Sintonía: Un libro de trabajo para padres. Ese cuaderno está diseñado para ayudarles a trabajar juntos para construir su matrimonio y su familia. Cada sección les ayudará a alinear su visión para su matrimonio y familia, y las preguntas les ayudarán a ponerse de acuerdo en la crianza de los hijos. Es un PDF de 13 páginas con 5 secciones: Autoevaluación, Trabajando juntos, Ritmos familiares, Las cosas difíciles y Mirando hacia adelante. Cada sección contiene 20 preguntas que te ayudarán a tener tanto las conversaciones divertidas como las difíciles necesarias para ponerse de acuerdo en la crianza de los hijos.
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Escrito por Lindsay Few, Editora de Contenidos en Awesome Marriage
Traducción al Español
Débora Tabilo Acuña Coordinadora de Español en Awesome Marriage